Es muy recomendable para todos ir y estar por allí 2 horas y media y con un poco de suerte ver a los lobos si les da de comer su guarda.
En el chiringuito de Enanos donde nos han tratado muy bien y hemos jugado, además de comer helados.
Se nos sumaron en el lago unos cuantos del año pasado, que han crecido un trozo por cierto.
Por la noche tuvimos a Jorge, el amigo de Pío , que nos contó cuentos de miedo.
Por entreúltimo el cambio de guardia con un mini , Eric, que quiso acompañarnos
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